Muchos de los sistemas mecánicos de la industria, en su mayoría, están sujetos a esfuerzos térmicos derivados de la fricción o la presión a la que, permanentemente, están expuestos durante su operación. Dadas estas condiciones, los fabricantes de equipos o componentes establecen los parámetros máximos de temperatura que se puede alcanzar indicando que, cualquier incremento por arriba del máximo permitido sea considerado como anormal e indicador, según el valor alcanzado, de algún tipo de anomalía que deberá ser investigada o reparada a la brevedad.
Existen especificaciones, normas y manuales que establecen los parámetros de la temperatura de operación de los equipos y sus componentes. Respetar estos parámetros e implementar rutinas predictivas para el monitoreo de la condición de los equipos mecánicos son buenas prácticas que coadyuvan a la reducción de costos vinculados al mantenimiento correctivo de los equipos.
Un dato. El análisis de vibraciones es una técnica predictiva que acompaña muy bien a las inspecciones termográficas de equipos mecánicos.